¿CÓMO SUPERAR LA ANSIEDAD?

¿Es posible superar la ansiedad cuando llevas ya un tiempo sufriéndola?

Hace ya un tiempo leí un artículo de Elvira Lindo en el País titulado «Cuando te come la ansiedad» que recomiendo totalmente. Lo primero que pensé al leer el artículo fue: “qué valiente, se atreve a desvelar que sufre, que tiene ansiedad, que siente miedo, que tiene fobias…”. Y la verdad es que es una muestra de honestidad por su parte escribir sobre su ansiedad, su sufrimiento. De esta forma contribuye a hacer visible lo invisible.

Pareciera que todos nos esforzamos mucho en parecer personas equilibradas, que tenemos todo bajo control. Cuando realmente no es así. Todos somos susceptibles de sufrir ansiedad. Aunque a menudo hacemos todo lo posible por mantener nuestra fachada y no mostrarnos vulnerables. No mostrar nuestro sufrimiento.

¿De dónde viene la ansiedad?

superar-la-ansiedad-Psicologia-en-BarcelonaAntes de profundizar sobre cómo podemos superar la ansiedad vamos a preguntarnos de dónde sale. En el artículo de Elvira Lindo que os mencionaba hubo algo que me llamó la atención y es común en el inicio de un proceso de psicoterapia.

Cuando aún no hemos podido encontrar el origen de la ansiedad pensamos que la ansiedad es algo que viene de fuera y se te mete dentro sin que nosotros seamos agentes de este hecho. Parece ser “algo que nos pasa” en lo que nosotros no intervenimos.

Si esto fuera así, poco tendríamos los psicoterapeutas a hacer y los pacientes a cambiar. Como mucho los psicólogos podríamos ayudar a nuestros pacientes a soportar la cruz. Uno de los primeros pasos en toda terapia es pasar del “me pasa” a “yo hago”, “yo funciono de esta forma”.

Asumir que somos agentes activos en lo que nos pasa. Pasar del pronombre ME al pronombre YO. Esto nos permite ponernos en una posición donde tenemos margen de cambio.

¿Por qué sentimos ansiedad?

La ansiedad aparece en el momento en que tenemos un conflicto interno entre diferentes partes de nosotros. Tiene la función de permitirnos afrontar dicho conflicto y llegar a una resolución.

Pongamos que entramos en una tienda y vemos algo que nos gusta mucho, miramos la etiqueta y el precio es imposible de pagar para nuestro bolsillo. Imaginemos que de repente aparece en nuestra cabeza la idea: “me lo puedo llevar, nadie está mirando”. Aquí se inicia un conflicto entre nuestro deseo (quiero este objeto) y la norma (no se roba). Comenzamos a agitarnos, notamos que se nos acelera el pulso, se altera nuestra respiración. Y ahí nos vemos obligados a decidir qué queremos hacer:

  • Salir por la puerta de la tienda con el objeto escondido dentro del bolso infringiendo la norma.
  • Dejar el objeto en su sitio, aceptar que no podemos pagarlo y que no está bien llevarnos algo por lo que no hemos pagado.
  • Dejarnos llevar por el deseo sin infringir la norma y usar la tarjeta de crédito de forma impulsiva.
  • Decidir pagarlo a plazos.
  • Esperarnos a cobrar la paga doble para comprarlo.
  • Decidir que no lo necesitamos y renunciar a él.

Éste es un ejemplo muy simple, hasta tonto, pero permite ver como la ansiedad nos moviliza a decidirnos y resolver el conflicto de alguna forma. Permite que se dé un diálogo entre el deseo y la norma, en este caso.superar-la-ansiedad-Psicologia-en-Barcelona

La ansiedad: un conflicto no resuelto

Pero claro, no todos los conflictos internos son tan simples como éste. Cuando alguien llega a la consulta con un cuadro de ansiedad generalizada es necesario darle herramientas para poder enfrentarse a los síntomas físicos que provoca la ansiedad.

Después podemos pasar a explorar la historia previa, su historia familiar y personal, ver su forma de enfrentamiento de los conflictos, etc. Podemos intuir que ha habido algún punto de conflicto el cual naturalmente la persona no ha podido resolver. Muchas veces no hay un único factor, si no una suma de factores que desembocan en la ansiedad.

Es decir, la ansiedad se generaliza si no conseguimos ponerle un punto final al conflicto. Allí será donde aparecerán diferentes síntomas en función de cada persona, de su historia, de su concepción de la realidad, de los significados que da a cada evento. La ansiedad es la punta del iceberg, la parte visible, pero debajo se encuentra el conflicto que lo ha originado.

¿Cómo superar entonces la ansiedad?

El problema es cada uno de nosotros nos perdemos en nuestro propio bosque.Uno ya no sabe dónde está ni cómo salir de allí. Nos desorientamos y ya no sabemos qué camino escoger. Eso no significa que los estados de ansiedad no se puedan superar, sino que a menudo hace falta ayuda externa. Es imposible orientarnos sino tenemos un punto de referencia.

Necesitamos ayuda para darle significado a lo que nos pasa. Poner un poco de luz y comenzar a entender por qué hemos llegado a funcionar de una determinada forma. Eso implica trabajo personal y no curaciones milagrosas, las cuales no existen en la psicoterapia. Es importante salir de explicaciones tipo “he de aprender a vivir con la ansiedad”, “esto ya ha pasado en mi familia”,  “es un problema biológico”.  Éstas simplemente nos llevan a aceptar la cruz con resignación, pero no a entender cómo es que estamos cargando con ella y si realmente la queremos.

 

María Martín Santacreu

Psicóloga/Psicoterapeuta familiar y de pareja

Col. núm. 15745

Artículo publicado originalmente en: http://www.centregrat.com/es/como-superar-la-ansiedad/